Según la Biblia Cristiana ocurrió de esta manera
Después de la creación, Dios creó a Adán con barro de la Tierra, y lo puso en el Jardín del Edén que había creado. En el jardín, además de numerosos árboles frutales, estaban el árbol de la vida y el árbol de la ciencia del bien y del mal. Para regar los jardines, había un río con cuatro ramificaciones, un río se llamaba Río Pisón (rodeaba la región de Havilia, donde había oro), el segundo río Guihon (rodeaba la tierra de Cus), el tercer río es Tigris (a oriente de Asiria) y el cuarto es el Éufrates.
Dios le dijo a Adán que podía comer de lo que quisiera menos del árbol del bien y del mal, ya que al hacerlo moriría.
Le presentó a todos los animales, y Adán les puso un nombre a cada uno. Pero se sentía solo, y para quitar su soledad, Dios hizo a Eva con una costilla de Adán.
Adán dijo: ésta vez, sí es hueso de mis huesos y carne de mi carne.
Felices en el jardín, una serpiente se acercó a Eva y le dijo:
—¿Es verdad que no puedes comer de ningún árbol? —a lo que Eva contestó:
—Podemos comer de todos menos del fruto del bien y del mal.
La serpiente dijo a Eva que si comía de ese árbol, no moriría y sus ojos se abrirían siendo como los de Dios, conocedores del bien y del mal.
Eva comió y compartió con Adán. Cuando Dios regresó, ellos se escondieron, porque les daba pena estar desnudos. Dios los llamó y les dijo:
—¿Quién les ha dicho que están desnudos?, ¿acaso comieron del fruto del bien y del mal?
Ellos le contaron a Dios lo sucedido.
Dios maldijo a la serpiente, le dijo que se arrastraría todos los días de su vida y puso enemistad entre ella y la mujer, diciendo que la mujer le aplastará la cabeza.
Adán y Eva, fueron desterrados del Edén, y destinados a trabajar por su comida todos los días de su vida hasta morir y regresar a la Tierra. Dios les dijo: polvo eres y al polvo regresarás.
En cuanto al árbol de la vida, Dios lo custodió con querubines para protegerlo. Quien comiera de este árbol, viviría eternamente.